La técnica es muy sencilla: se pone una extensión sobre cada una de tus pestañas naturales. Puede optarse también por las más naturales, que, como decíamos, imitan a las reales, o intensificar aún más la mirada con extensiones efecto rímel, de las que os estamos hablando. Además, disponemos de diferentes larguras y curvaturas, para poder realizar el diseño apropiado en cada caso personalizado.